La vida te plantea diferentes situaciones, depende de como las resuelvas es como irás desempeñando tu labor día a día para convertirte en alguien mejor y más sabio.
Hoy me levanté extraña, con una sensación de molestia con el mundo y no sabía el porqué, solo sabía que en algún momento sucedería algo que alteraría mis factores establecidos hasta el momento. Y, debo decir que tenía razón. El mismo tormento de incertidumbre y tristeza de hace cinco meses atrás. Ese viaje postergado que ya no podré hacer, y me angustia, sí, me angustia pensar que con tan joven vida no podré realizar ese viaje porque me siento "atada". Pero, descuiden, atada de la buena forma. Porque un lazo sentimental completamente fuerte y establecido hace que no quiera irme, pero que también, por momentos, me den ganas de que me absorba la tierra. No puedo seguir postergándolo, pero no puedo irme. Así, que es hora de que me despida de Londres. Adiós Londres, adiós humedad del aire, adiós Big Ben, adiós London Eye, adiós a la posible más grande aventura que pueda tener en mi adolescencia. Pero, ¿saben algo? estaré orgullosa de decirle a mis hijos el día de mañana que yo abandoné a la mayor aventura de mi adolescencia, por amor.
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