viernes, 14 de septiembre de 2012

"Sobredosis" (Cuento)

"Hipocresía. Es una de las palabras que me vienen en estas últimas veinticuatro horas para describirte. Una palabra que aunque te duela, te describe. Siempre me reprochaste el hecho de que yo hablase de vos en ciertos lugares y de cierta forma cuando en realidad vos también lo hacías, sin que yo me diese cuenta... ¿Cómo se llama eso? ¿no es hipocresía, acaso? Creería que sí.
Injusticia. Injusto es que yo no pueda expresarme como quiero y como me siento solo por temor a que lo leas y tengamos problemas. Ya no más. Voy a decir lo que quiera y no me importa como te lo tomes. Total, haga lo que haga siempre vas a decir que soy egoísta... Bueno, ahora me vas a conocer bien egoísta.
Te escribo esto de puño y letra porque me gusta escribir cartas acerca de las cosas que me pasan para luego dárselas a la gente que le corresponden. ¿Por qué? no lo sé, simplemente no soy buena expresándome con la voz. ¿Qué puedo decir?
Últimamente nuestras discusiones o peleas (como quieras llamarlo), se hicieron muchísimo más recurrentes, y eso comenzó a angustiarme más de lo que ya estaba. Siempre supe que este momento llegaría pero no quería que fuese tan pronto... Esta vez no hay un 'la próxima vez...', no.
Sinceramente ya no puedo con esto, ya no quiero lidiar todas las noches antes de dormirme con el llanto que me provoca la angustia de tu 'amor', si es que así se puede llamarse. Sé que sin tu amor no soy nada, sé que va a ser muy difícil para los dos esta situación pero, si de verdad me amas tanto, déjame tomar esta decisión. Lamentablemente, y aunque nos cueste aceptarlo, es mejor que estemos separados a que estemos juntos.
Te amo, y lo voy a hacer siempre, por más que ya no seamos uno. Sos lo mejor que me pudo haber pasado en la vida, gracias por todas las experiencias magníficas que me hiciste vivir"

Terminé la carta entre llanto y el temblequeo constante de mi mano al escribir, ya no había vuelta atrás. La decisión estaba tomada. No podía vivir con él, pero tampoco sin él. Es como es como si todo este tiempo hubiese estado respirando un oxígeno sumamente tóxico, al fin y al cabo iba a terminar conmigo de alguna forma u otra. Así, que decidí que fuese por decisión propia.

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